Lunes, 16 de octubre de
2017
El
exgobernador Mario Villanueva
Les invita a
reflexionar:
Sobre
Huracanes, inundaciones, sequías y otros desastres.
Por el cambio del clima debido al calentamiento del planeta
(Primera Parte)
El cambio del clima por el calentamiento global del planeta, es un
problema sumamente grave que está afectando al mundo con inusitados fenómenos
meteorológicos cada vez más frecuentes y de mayor magnitud, cambios en el
régimen de lluvias, inundaciones y sequías, que están causando pérdida de vidas
y enormes daños económicos.
Algunas muestras son los ocho ciclones en la primera quincena de
Septiembre, con el Harvey cuyos efectos fueron calificados con uno de los
desastres más costosos en la historia de los Estados Unidos
De América. Destacan también los cuantiosos daños causados por Hilda
en Baja California Sur y otros Estados, que además sufrieron los embates de
otros ciclones y tormentas tropicales.
La ciudad de México fue afectada por inundaciones provocadas por lluvias,
que el gobierno calificó como históricas y crearon el caos durante varios días.
Las Islas de Caribe, entre ellas Barbuda, Antigua y Puerto Rico también
fueron severamente afectadas por los huracanes; y, además, inundaciones en los
países asiáticos India, Nepal y Bangladesh provocaron más de mil muertos, en
Rusia se dio una cruenta sequía, y aumentó la temperatura en Estados Unidos.
El calentamiento por el efecto invernadero.
El calentamiento del planeta se debe al exceso de gases a los que se
les llama “de efecto invernadero”, que se acumulan en la atmósfera. Los principales
son:
·
El vapor de agua que forman las nubes
·
El dióxido de carbono, conocido como CO2 –que por
cierto exhalamos al respirar-, el cual se produce en grandes cantidades por la
quema de combustibles fósiles como lo son el petróleo y sus derivados
(gasolina, diésel, etc.), el gas, y el carbón mineral.
·
El óxido nitroso (óxido de nitrógeno-NO), que también
se produce por la combustión de esos combustibles.
·
El metano, que es producido en la descomposición
y putrefacción de la materia orgánica.
¿Por qué se le llama efecto invernadero?
En términos sencillos, un invernadero es un espacio cerrado, una
especie de casa con el techo y paredes que permiten el paso de la luz del sol
hacia adentro, reflejando parte de los rayos solares hacia el exterior, a
través del material translúcido, pero quedando el interior con el adecuado
calor para los cultivos, con la posibilidad de regular la temperatura interior
por medios artificiales.
Los gases mencionados tienen un efecto similar al del invernadero pues
forman una especie de techo en la atmósfera que refleja una parte de los rayos
del sol hacia arriba y otra parte la deja pasar a la superficie de la tierra
(de la tierra y del mar), que absorbe una parte y refleja otra hacia la
atmósfera, como radiación de calor, la cual debe atravesar la capa de gases,
pero si hay de éstos, la radiación de la tierra no pasa esa capa y sé que
queda, por lo que el ambiente se calienta produciendo cambios en el clima.
Como podemos observar, lo gases de efecto invernadero son benéficos,
pues impiden un sobrecaliento de la superficie terrestre. El problema radica en
el exceso de esos gases, que irresponsablemente hemos estado produciendo, lo
que se traduce en el calentamiento global del que tanto científicos como
líderes políticos y religiosos nos vienen advirtiendo desde hace años, y cuyos
efectos nocivos son los siguientes:
·
Ciclones y tormentas tropicales cada vez más
frecuentes, en mayor número y magnitud.
·
Cambio en el régimen de lluvias, provocando inundaciones catastróficas
y seguías.
· Derretimiento de los hielos eternos en el polo
norte (el ártico) y el polo sur (la Antártida), provocando incremento del nivel
del mar que, de seguir subiendo la temperatura, podrían desaparecer ciudades
costeras como nueva York en los Estados Unidos y Ámsterdam en Holanda, así como
parte de la franja costera del este del continente americano, que incluye los
más de 800 km del litoral de Quintana Roo.
·
Entibiamiento del mar, que además de producir
ciclones afecta la vida de la fauna marina.
·
Absorción excesiva de CO2 en el mar, que provoca
que las aguas se vuelvan ácidas, dañando los corales de los arrecifes y a los
animales con concha (caracoles y otros), que se les va disolviendo.
·
Contaminación del ambiente agravándose las
enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
La situación es tan grave, que
los gobiernos de la mayoría de los países del mundo se han comprometido a
revertir las causas del calentamiento global. De esto y, de lo que podemos y debemos
hacer los seres humanos individualmente y como sociedad, nos ocuparemos en la
Segunda parte.
Gracias nuevamente por prestarme
su atención. Les envío mi abrazo afectuoso.
Mario
Villanueva
Exgobernador de Quintana Roo
16 de octubre de 2017
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